En el libro --La Contradicción en la poesía de Xavier Villaurrutia--,
la autora Gloria Estela Baez Pinal,
refiere el pensamiento de Octavio Paz sobre el poeta Mexicano.
la autora Gloria Estela Baez Pinal,
refiere el pensamiento de Octavio Paz sobre el poeta Mexicano.
[Villaurrutia…] no se propuso en sus
poemas la trasmutación de esto en aquello
–la llama en hielo, el vacío en plenitud–
sino percibir y expresar el momento del tránsito en los opuestos.
el instante paradójico en que la nieve comienza a obscurecerse pero sin ser sombra todavía […].
el entre no es un espacio sino lo que está entre un espacio y otro;
tampoco es tiempo sino el momento que parpadea entre el antes y el después.
el entre no está aquí ni ahora.
el entre no tiene cuerdo ni substancia.
su reino es el pueblo fantasmal de las antinomias y paradojas.
el entre es el pliegue universal.
el doblez que, al desdoblarse, revela no la unidad sino la dualidad,
no la esencia sino la contradicción.
el pliegue esconde entre sus hojas cerradas las dos caras del ser;
el pliegue, al descubrir lo que oculta, esconde lo que descubre;
el pliegue, al abrir sus dos alas, las cierra;
el pliegue dice no cada vez que dice sí;
el pliegue es su doblez: su doble, su asesino, su complemento […].
en la topología poética,
la figura geométrica del pliegue representa al entre del lengua je:
al monstruo semántico que no es ni esto ni aquello,
oscilación idéntica a la inmovilidad, vaivén congelado.
el pliegue, al desplegarse, es el salto detenido antes de tocar la tierra […].
el pliegue y el entre son dos de las formas que asume
la pregunta que no tiene respuesta.
La poesía de Villaurrutia se repliega en esa pregunta y se despliega entre las oposiciones que la sustentan.
–la llama en hielo, el vacío en plenitud–
sino percibir y expresar el momento del tránsito en los opuestos.
el instante paradójico en que la nieve comienza a obscurecerse pero sin ser sombra todavía […].
el entre no es un espacio sino lo que está entre un espacio y otro;
tampoco es tiempo sino el momento que parpadea entre el antes y el después.
el entre no está aquí ni ahora.
el entre no tiene cuerdo ni substancia.
su reino es el pueblo fantasmal de las antinomias y paradojas.
el entre es el pliegue universal.
el doblez que, al desdoblarse, revela no la unidad sino la dualidad,
no la esencia sino la contradicción.
el pliegue esconde entre sus hojas cerradas las dos caras del ser;
el pliegue, al descubrir lo que oculta, esconde lo que descubre;
el pliegue, al abrir sus dos alas, las cierra;
el pliegue dice no cada vez que dice sí;
el pliegue es su doblez: su doble, su asesino, su complemento […].
en la topología poética,
la figura geométrica del pliegue representa al entre del lengua je:
al monstruo semántico que no es ni esto ni aquello,
oscilación idéntica a la inmovilidad, vaivén congelado.
el pliegue, al desplegarse, es el salto detenido antes de tocar la tierra […].
el pliegue y el entre son dos de las formas que asume
la pregunta que no tiene respuesta.
La poesía de Villaurrutia se repliega en esa pregunta y se despliega entre las oposiciones que la sustentan.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario